sábado, 4 de mayo de 2013

NO ES FÁCIL PEQUEÑA ARDILLA

Elisa Ramón
Kalandraka, 2004

"La ardilla roja estaba triste. 
Sentía una pena muy honda porque su madre se había muerto y pensaba que nunca más sería feliz.
Su padre le secaba las lágrimas con ternura, intentando consolarlo. 
Mamá siempre estará con nosotros...
Y con la mano, se golpeaba el pecho: ¡Aquí!
La ardilla no lograba entender. Lo único que veía era que ella ya no estaba..."





No hay comentarios:

Publicar un comentario